¿Cómo son las personas creativas?
¿Por qué es importante tener un proyecto creativo?
¿Qué tiene que ver esto con la psicoterapia?
Facundo Arenas sostiene que “tener un proyecto creativo nos ayuda a atravesar los momentos difíciles de la vida con mayor entereza y claridad. Porque nos obliga a salir del tiempo lineal (ese en el que surgen los problemas) y a conectarnos con el trascendental (ese donde habitan las soluciones, o la energía necesaria para encontrarlas).
Hacer el ejercicio de entrar en el espacio creativo periódicamente expande nuestra conciencia, nos permite sintonizar..”
En otro texto dedicado a la creatividad es D.Schwanitz quien asegura que:
Los individuos creativos son capaces de combinar ideas que para individuos más simples son contradictorias.
No se irritan ante las opiniones contrarias y las objeciones, pues están acostumbrados a experimentar con ellas y siempre encuentran algo aceptable.
Suelen pensar en direcciones opuestas y pueden dejar abierta la conclusión. Los individuos creativos no temen la ambivalencia, la contradicción y la complejidad, porque éstas les sirven de estímulo.
Son lo contrario de los fanáticos, a quienes les horroriza la complejidad y son propensos a las simplificaciones.
Lo esencial del proceso creativo tiene que ver con suspender toda clase de juicio crítico.
Si ponemos atención es a partir partir de esto algunos desarrollan conceptos como la tormenta de ideas; o el flujo del pensamiento; la libre asociación; la meditación; la zapada de los músicos; la escritura automática.
Son varios los que se han ocupado de algunas de estas relaciones.
Emilio Rodrigué en El libro de las separaciones se refiere a la asociación libre como la técnica de meditación del psicoanálisis. Fromm y Suzuki escribieron un libro muy interesante llamado Budismo Zen y Psicoanálisis. David Lynch en Atrapa el pez dorado se extiende sobre la meditación trascendental y la creación.
John Lennon compone uno de sus mejores álbumes (Plastic Ono Band) luego de su experiencia con la Terapia del Grito Primal de Janov.
A veces los pacientes te confiesan “hoy no tengo idea de qué hablar, no traje nada preparado”. “Mucho mejor, así suelen surgir las mejores sesiones” podemos responder.
Se invita a seguir la regla fundamental del análisis, creado por Freud, la libre asociación: “diga todo cuanto se le cruce por la mente”.
Ciertos pacientes escriben sus pensamientos en la semana. Otros registran sus sueños. El paciente propone y el terapeuta baila de acompañante.
«La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando»
Se trata de dejar hablar todas nuestras voces. Tal cual decía el poeta Whitman, contenemos multitudes.
[La posibilidad de seguir la regla fundamental y asociar libremente por momentos se ve bloqueada. Siguiendo la teoría reichiana estas resistencias son caracteriales. El trabajo psicocorporal puede ser de importancia trascendente]
En la terapia por momentos puede parecer por momentos que nos vamos con más preguntas que respuestas. Y esta es una muy buena noticia.
«La ignorancia es mucho más rápida que la inteligencia. La inteligencia se detiene a cada rato a examinar; la ignorancia pasa sobre los accidentes del terreno que son las nociones a gran velocidad, y jamás hay nada que le llame la atención. Así llega rápidamente a cualquier parte… especialmente a las conclusiones.» (A.Dolina)
Si realmente atravesamos un proceso de transformación se empezaran a descongelar algunas de nuestras certezas absolutas. Habitaremos con mayor comodidad nuestras contradicciones. Juzgaremos menos. Nos reiremos más.
Habremos restablecido parte de nuestra capacidad creativa.
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